La empresa malagueña ORP será la encargada de la rehabilitación del Gran Hotel Miramar. Este proyecto propone recuperar, en un plazo de dos años, la mayor parte del programa funcional original del edificio tras su etapa como sede central de los juzgados de Málaga.
El hotel, situado en una parcela de 12.883 m2, constará de un total de siete plantas. En el nivel inferior se encontrará el acceso principal donde se ubicará la recepción y las zonas de administración, atención al cliente y equipaje. En las plantas superiores se establecerán las 191 habitaciones dobles con las que contará el hotel, así como varias suites, todas ellas, dotadas de vistas al mar.
Además, el edificio contará con un patio central cubierto por un importante lucernario de cristal que funcionará como rótula central de todos los salones de esta zona noble del edificio. Este patio dará acceso a la zonas de tiendas, cafetería-bar, salas de reuniones, comedores, sala de convenciones y acceso a la terraza de la fachada sur desde donde se podrá acceder a los jardines, piscina y cafetería exterior.
Algo más que una instalación hotelera
El Palacio del Miramar se ha convertido en un elemento clave del paisaje malagueño y una de las referencia arquitectónica de la ciudad. Su estratégica situación con respecto al eje del litoral este de la ciudad, y su valor histórico al haber sido testigo de los principales acontecimientos sociales de la ciudad de Málaga durante todo el siglo XX, convierten a este edificio en un hito referencial, físico y social.
«Una recompensa tras más de 20 años en el sector»
Dedicados fundamentalmente a la restauración y rehabilitación de edificios y monumentos, ORP lleva desde 1995 realizando importantes actuaciones como la que están llevando a cabo en la casa Diocesana para el Obispado de Málaga o las intervenciones integrales en tres de los edificios de calle Larios, propiedad de Sociedad Azucarera Larios.
En palabras de Silverio Cuevas, gerente de ORP, la ejecución de este proyecto «supone la consolidación de la empresa como referente en la rehabilitación y restauración en Málaga, así como, una satisfacción profesional y una recompensa tras los casi veinte años de actividad de la misma».
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